Un negocio
privado a costa de trabajadores y usuarios
La política privatizadora del gobierno macrista
intenta llegar al servicio público de bicicletas. A través de un decreto
firmado el 14 de febrero se llama a una licitación para tercerizar y luego
hacer pago el servicio de bicicletas de la ciudad; afortunadamente, esta
licitación hoy está suspendida por un recurso de amparo presentado en el Juzgado
en lo Contencioso y Administrativo Nª 12.
Independientemente de la suspensión por el recurso de
amparo, queremos hacer notar que es la misma política privatizadora que
se ha intentado con el Hospital Borda, con el espacio público, el enrejamiento
de los parques, el vaciamiento del Teatro San Martín con la represión a la Sala
Alberdi. Es decir; se intenta que las privatizaciones se impongan a lo público
y que sean las empresas las que gestionen la ciudad de Buenos Aires.
Respecto al servicio público de bicicletas el llamado
a licitación tiende a que el servicio deje de ser gratuito, se incluirá
automatización de una parte de él y la empresa privada que lo tomaría será
financiada por el gobierno de la Ciudad a través de una erogación de $135
millones entre 2013 y 2017 para construir 170 nuevas estaciones a cambio de 800
bicicletas que pondría la empresa. El esponsoreo privado será otra de las
novedades del negociado. Antecedentes en otros países como Brasil indican que
la beneficiaria de la publicidad comercial será la empresa, con lo
cual esta estaría cobrando una importante suma por publicidad, mientras
tanto los usuarios tendrían que abonar un servicio que hoy es gratuito.
¿Que pasaría con los trabajadores?
De esta manera el Estado se desentendería de
los 160 empleados con contrato basura (monotributistas) que hoy atienden el
servicio, serían tercerizados como sucede con los trabajadores de
limpieza y seguridad del Gobierno de la Ciudad, la empresa pasaría a ser el
nuevo empleador.
En esta nueva situación en que se ha postergado la
licitación nuestra propuesta es salir de la condición de monotributistas y
tener la estabilidad real en los puestos de trabajo con los derechos ganados
históricamente por los trabajadores como es la Obra Social, el aguinaldo
y vacaciones.
Los empleados y sus condiciones
laborales
Las condiciones de trabajo actuales son deplorables,
el lugar donde se desarrollan las tareas es un cubículo de chapa expuesto a las
inclemencias del tiempo: en invierno extremadamente frío ya que carece de
aislantes térmicos y en verano sofocante por el “efecto invernadero” que
provoca su conformación estructural. Obviamente no cuentan con sistemas de
acondicionamiento climático, siquiera ventiladores o estufas. Los baños químicos
no reciben la atención debida, habiéndose producido entre las mujeres
trabajadoras casos de infecciones urinarias; además, las provisiones de agua
son muy escasas. No existe lugar donde higienizarse las manos pese a que los
agentes están en contacto con el público. Toda discusión sobre estos temas se
soslaya además de tener los salarios más inferiores al que percibe cualquier
agente de la ciudad.
¿Cuál es la salida?
La estabilidad y la mejora de las condiciones de
trabajo no vendrán de la mano de la tercerización laboral de estas empresas que
hacen negocios con el Estado y se guardan parte de los sueldos que el Estado
paga por cada trabajador.
Las tercerización de funciones es en detrimento
de sueldos, derechos y condiciones laborales. En las empresas concesionarias
reina una verdadera dictadura de la patronal. Por otra parte la tercerización
fractura la unidad de los trabajadores en múltiples convenios y los pone en
peores condiciones para discutir derechos laborales y enfrentar cualquier ataque
de la patronal.
Hay que tener en cuenta también que un blanqueo
salarial que resultara de una privatización puede incluir una mejora
transitoria, una especie de “pan para hoy y hambre para mañana” por eso
es necesario proceder a una organización de los cros./as. Para garantizar cada
puesto de trabajo, mantener la unidad de los trabajadores, denunciar la
tercerización y plantear el pase a Planta Permanente y el respeto de convenio
único.
Es necesario que estemos unidos con los usuarios,
muchos de ellos trabajadores, para mantener la gratuidad del servicio y para
defender nuestros derechos como trabajadores.
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